El PRO está aprovechando las vacaciones de invierno y la pausa del Congreso para discutir algunas cuestiones puertas adentro. Este martes se reunieron vía videollamada Mauricio Macri y otros referentes del la mesa chica del PRO: gobernadores, algunos diputados e intendentes alineados.
Mientras tanto, siguen las tensiones internas y todavía resuenan los rumores de un enojo de Macri con Milei por su limitada participación en el Pacto de Mayo: considera que "no se valoró su esfuerzo" a pesar de ser el único expresidente presente aquel día, lo que podría influir en la antesala de un acuerdo en el Congreso y en la previa de las elecciones 2025.
Según el diario digital del multimedio TN, Rogelio Frigerio -gobernador de Entre Ríos- no participó de la reunión por "temas de agenda". Por otro lado, sí estuvieron Ignacio Torres -de Chubut-, Jorge Macri -Jefe de Gobierno porteño- y los intendentes Guillermo Montenegro -de General Pueyrredón- y Soledad Martínez -de Vicente López-. Además, participaron del encuentro los diputados Cristian Ritondo y María Eugenia Vidal.
Las ausencias en la reunión del PRO
La ausencia más destacada tiene que ver con aquellos referentes más cercanos a Patricia Bullrich, incluyendo a Damián Arabia, vicepresidente del PRO. Tampoco invitaron a los intendentes Diego Valenzuela -de Tres de Febrero- ni a Ramón Lanús -de San Isidro-.

Con este encuentro, Macri planea por un lado comenzar a reforzar la idea de mantener una cierta dependencia del gobierno nacional en el Congreso y apoyar solamente las medidas que consideran beneficiosas sin descuidar su propia agenda. Además, el expresidente ya está preparando su reaparición pública con un acto en la provincia de Buenos Aires -posiblemente en Vicente López-. Si bien no hay fecha confirmada, todo indica que sería en agosto. Este evento también funcionaría como una suerte de relanzamiento del PRO.
Con respecto al rol del partido en el Congreso, Mauricio Macri sigue repitiendo que apoyaban todo "hasta la Ley Bases" como límite. A partir de ahí, comenzarían su propio camino, priorizando sus propios proyectos sin descuidar la gobernavilidad, plan que pretende seguir el exmandatario en el segundo semestre del año.
Para esta segunda etapa del año, el oficialismo tiene pendiente discutir una reforma electora e impulsar la eliminación de las PASO. Por su parte, el PRO está de acuerdo solamente con modificarlas para que dejen de ser obligatorias, aunque no está de acuerdo con su eliminación.