Aníbal Fernández se refirió a la denuncia por violencia de género contra Alberto Fernández al aire de Radio Con Vos. El ex ministro de Seguridad aseguró que la faceta del expresidente trascendida con la demanda no es la que él conoció y defendió “el concepto del peronismo”.
“Nosotros hicimos mucho trabajo con el tema de violencia de género, sobre todo mi mujer, que es la creadora del 144. Hoy rompieron todo, pero eso permitió que muchas mujeres dejaran de sufrir situaciones de violencia de género”, resaltó Aníbal Fernández en conversación con Futuro Imperfecto.
El exfuncionario resaltó los valores del peronismo y sus políticas más allá de la denuncia por violencia de género que pesa sobre el expresidente y negó que la denuncia amerite replantear los fundamentos del movimiento.
“Jamás vi una cosa de estas características” y “nunca vi una cosa así” fueron las frases que usó para referirse a su sorpresa frente al accionar violento de Alberto contra Fabiola Yañez. “Lo que hay que hacer es escucharla a ella como se la escuchó, trabajar los elementos ofrecidos y analizar la situación a fondo. Si no fue cierto él tendrá la vida tranquila, si fue cierto deberá pagar las consecuencias”, evaluó.
Consultado sobre si el peronismo no está limitándose a desmarcarse de Alberto Fernández en lugar de hacer autocrítica, Aníbal Fernández respondió “yo no veo eso ni por casualidad” y subrayó que “el concepto del peronismo es uno solo, el que trabajé toda la vida”.
“Los problemas con las mujeres van a seguir existiendo toda la vida, que no se hayan dado cuenta hasta ese momento y nadie se haya querido ocupar no hace que uno tenga que mirar para el costado. Hay que seguir insistiendo sobre ese tema y encontrar alternativas para que las políticas surtan su efecto”, añadió Fernández.
Finalmente, el dirigente insistió en su defensa del movimiento justicialista: “El peronismo no va a bajar los brazos nunca y va a seguir representando a los que menos tienen, a los trabajadores, a los viejos”. De todos modos, reconoció que el frente no dejó “macana por hacer” porque “aparecían discursos para tratar de enseñarnos qué teníamos que hacer y después terminamos como terminamos”.
“Llegó la hora de que cada uno se haga cargo de la parte que le toca”, concluyó.
