En el marco de las decenas de tomas de facultades que se llevan adelante en todo el país, la Universidad de Quilmes fue escenario de una serie de incidentes mientras se desarrollaba una asamblea para definir si tomar el edificio o no. Aunque militantes de La Libertad Avanza aseguraron que ellos fueron los atacados, los alumnos sostuvieron lo contrario y la dirección de la casa de estudios también apuntó hacia los seguidores de Milei.
En la sede de Bernal de la Universidad de Quilmes, los estudiantes realizaron ayer una asamblea para definir la toma del edificio contra el veto a la Ley de Financiamiento Universitario que firmó Javier Milei y obtuvo apoyo en Diputados. Llegado un punto, los presentes detectaron la presencia de militantes de La Libertad Avanza a quienes identificaron como “infiltrados” y decidieron expulsarlos.
“Durante la asamblea que se desarrolló esta tarde en la sede de Bernal irrumpieron personas ajenas a la Universidad en actitud intimidante”, reconstruye el comunicado oficial de la UNQ. “Cuando los participantes de la asamblea, tras una votación, les pidieron que se retiraran para dejar deliberar a estudiantes que estaban decidiendo el futuro de las acciones de fuerza a tomarse, estas personas comenzaron a agredir a los más de 500 presentes y luego arrojaron GAS PIMIENTA en un espacio cerrado, que afectó a gran parte de la concurrencia”, detalla.
En ese sentido, los videos que circularon en redes sociales muestran a varios estudiantes descompuestos por efecto del gas, al igual que se difundieron imágenes de uno de los frascos utilizados por los liberales. “Fuera, fachos, fuera”, fue la respuesta de los alumnos contra los seguidores del Gobierno que se habían presentado en la facultad.
En redes sociales, los militantes de LLA aseguraron que lo sucedido en la Universidad de Quilmes fue exactamente al revés: ellos habrían sido agredidos y gaseados. La versión fue incluso reproducida por el actual secretario de “Culto y Civilización”, el bonaerense Nahuel Sotelo, quien escribió “hacemos responsable por las lesiones de los militantes nuestros a las autoridades, al Gobernador y al municipio”.
En cambio, las autoridades de la casa de estudios declararon: “Desde la Universidad repudiamos el accionar de estas personas ajenas a la comunidad universitaria y realizaremos las denuncias pertinentes para el cese de este peligroso accionar para la democracia”. Esta denuncia se suma, así, a otras varias noticias de infiltraciones de militantes adeptos al Gobierno en espacios universitarios, con el objetivo de entorpecer medidas de protesta.