El asado es uno de los platos insignia de la Argentina. Si bien muchos pueden jactarse de preparar "un buen asado", hay algunos descuidos que pueden alejarte de lograr un resultado óptimo. ¿Cuáles son los tres peores errores que podés cometer en la parrilla?
Más allá de poder conseguir una buena carne, gracias a la confianza que le puedas tener a una carnicería o a un carnicero, si no la preparás correctamente, te puede quedar dura, seca o arrebatada. Para eso, estos tips te van a ayudar.
Ser un asador experto es una tarea más difícil de lo que parece. Donde Manda Capitán es el bodegón-parrilla que arrasa en la Ciudad de Buenos Aires. Ubicado a pocos metros del Parque Centenario, sus expertos asadores saben qué hacer y qué no para sacar la carne en el momento indicado.
Hay decenas de fallas que pueden cometerse incluso sin querer y que pueden atentar contra la buena calidad del producto final. ¿Cuáles son y cómo evitarlas? Los parrilleros de Donde Manda Capitán nos comparten sus secretos.
¿Cuáles son los peores errores en la parrilla?
1. Prender el fuego con kerosene o alcohol
Un buen asador sabe exactamente cuánto carbón o madera necesita para preparar el fuego y, además, evita echarle alcohol o kerosene. El problema de usar ingredientes extra es que consume demasiado rápido el fuego y, lo peor, el asado puede tomar el sabor del combustible.
En la misma línea, no se debe arrebatar el fuego. Si le metés demasiado fuego al asado desde el principio (o si bajás mucho la parrilla), la carne se te va a quemar por fuera y no se termina de cocinar por dentro.
2. Usar carne sin descongelar o desgrasarla
No descongelar la carne antes de ponerla al asador es un error gravísimo que se comete más de lo que se debería. De hacerlo, los cortes quedarán excesivamente duros.
Por su parte, desgrasar la carne puede parecer una buena idea si te estás cuidando pero no es la solución. Hacerlo hará que el sabor ahumado que toma el asado (debido a la grasa que se derrite y quema con las brasas), desaparezca.
3. Cortar la carne para ver si está hecha
Un error muy común a la hora de preparar el asado es cortar un pedazo de carne para saber si está hecho por completo. Esto es grave ya que provoca que la carne largue su jugo y se seque antes de consumirla. Por este mismo motivo no se puede pinchar la carne hasta que se termine de cocinar.
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