En las últimas horas se conoció un video que muestra el momento en el que Liam Payne, el cantante británico que murió hace un mes en el barrio de Palermo, tuvo un encuentro con Ezequiel David Pereyra, empleado del hotel CasaSur acusado de entregarle drogas, horas antes de su muerte.
En las imágenes, difundidas por el portal estadounidense TMZ, se observa al ex integrante de One Direction saliendo del ascensor en el sótano del edificio, donde se encuentra con Pereyra. La conversación entre ambos fue breve y transcurrió cerca de las 14, tres horas antes de la caída del cantante desde su habitación en el tercer piso del hotel.
En ese momento Payne le habría pedido siete gramos de la misma droga que el empleado le había entregado previamente ese mismo día. En el video, además de Pereyra, aparecen otros dos trabajadores del hotel que presenciaron la charla y más tarde confirmaron el intercambio ante las autoridades. Según la investigación, una hora después de este encuentro, Pereyra entregó la droga al músico.
La Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N°14, a cargo de Andrés Madrea, investiga la muerte de Payne como un caso de abandono seguido de muerte y suministro de estupefacientes. Las autoridades determinaron que, en el momento de su caída, Payne presentaba trazos de alcohol, cocaína y un antidepresivo en su organismo, lo que sugiere que el músico había estado en un estado de policonsumo en las horas previas al incidente.
Además de Pereyra, la causa involucra a Rogelio Nores, un empresario argentino que se encargaba de la gestión de las finanzas del cantante, y a Braian Nahuel Paiz, un presunto proveedor de drogas. Los tres imputados fueron citados a indagatoria, aunque la fiscalía decidió no detenerlos, ya que los sospechosos se presentaron voluntariamente ante las autoridades y entregaron sus pasaportes.
Nores, dedicado a servicios de asesoramiento, dirección y gestión empresarial, era quien acompañaba de manera cotidiana al artista durante su estadía en Buenos Aires. En la investigación se lo señala como quien se ocupaba de cumplir los pedidos de Payne, quien no manejaba ni dinero ni tarjetas.
Paiz, por su parte, es acusado como proveedor de estupefacientes por “dos suministros claramente comprobados”. El joven es mozo en un restaurante de Puerto Madero, donde conoció al músico. “No le suministré drogas a Liam. Él me contactó en lo que es mi trabajo, nos pasamos el contacto y nos vimos esa noche. Dicen que él no se estaba drogando, pero cuando llegó al local en el que yo trabajo ya estaba drogado. De hecho, no comió”, dijo en una entrevista con el canal Telefé.