La Reserva Federal de Estados Unidos (FED) decidió bajar la tasa de interés en 25 puntos básicos, dejando el rango de referencia entre 4,25% y 4,5%. Este movimiento, anticipado por los mercados, marca la tercera baja consecutiva tras los recortes de septiembre y noviembre. En Argentina, esto repercute en un riesgo país "planchado" que podría significar un incentivo para inversiones externas.
La tasa de interés de los bonos del Tesoro de EE.UU, considerada "libre de riesgo", es el punto de partida que usa el JP Morgan para calcular el riesgo país, índice que muestra el costo del financiamiento externo. Al bajar la tasa de interés norteamericana, disminuye la base de cálculo, por lo que esto genera un leve alivio en el indicador argentino a la hora de emitir deuda.
El S&P Merval cerró la jornada en 685 puntos y los mercados emergentes, con la noticia de la FED, buscarán aprovechar la baja en la tasa de interés estadounidense para afianzarse.
Si bien el gobierno de Javier Milei aseguró que no emitirá deuda externa hasta 2026, el mercado prevé que habrá alguna colocación internacional antes de esa fecha. De hecho, el presupuesto presentado por la gestión anterior contemplaba que hasta un 18% de los títulos públicos para 2024 podrían emitirse en moneda y jurisdicción extranjera.

Por su parte, con la reciente asunción de Donald Trump a la presidencia, algunos analistas advierten sobre posibles maniobras para acelerar la baja de tasas. Si bien esto podría estimular la economía norteamericana, también podría generar riesgo inflacionario.