¿Buscás un bodegón especial, donde puedas comer rico y por buen precio? En Chacarita hay un lugar distinto a todos. De esos que te atrapan primero con la vista y después con el sabor. Porque acá no solo se trata de comer rico, sino también de sorprenderse con una propuesta original que combina tradición, color y un toque de vanguardia. En un mundo lleno de fusiones y reinterpretaciones, este bodegón encontró la manera de destacarse sin perder la esencia de los platos que todos amamos.
El proyecto nació en abril de 2022 y desde entonces no paró de crecer. El primer día ya habían despachado más de 150 cajas de pastas, y a las dos semanas, había una cuadra de cola antes de que abrieran. Así nació Tita, la vedette de Chacarita, que hoy tiene también una cantina en La Paternal donde se puede comer al sol, y con la calma de un mediodía de barrio. No se refieren a sí mismas como bodegón, pero la generosidad de sus platos y la impronta casera y barrial de sus locales encajan perfecto con el concepto.
Lo que enamora a primera vista son las formas y colores de sus ravioles, fettucine, parpadelle o cavatellis. Son tan lindos que dan ganas de sacarles una foto antes de probarlos. Pero una vez que se prueban, el flechazo es completo. Con ingredientes naturales como remolacha, espinaca, cúrcuma o carbón activado, logran una paleta de colores digna de vitrina. Y sí, todo 100% vegetal, aunque ese detalle llega después: primero se enamora el paladar.

Formas creativas, rellenos inesperados
Entre las estrellas del lugar se encuentra el trifungi, un raviol triangular relleno con tres tipos de hongos y un queso crema de cajú que hace olvidar cualquier versión tradicional. También hay variantes con kimchi, verduras de estación o salsas suaves a base de nueces y semillas, que elevan cada plato a otra categoría. Además de las pastas, el bodegón ofrece entradas como buñuelos o empanadas fritas y postres que varían con el tiempo, entre los que se cuentan unos deliciosos cannolis o una tentadora copa helada.
Su focaccia crocante es un imprescindible para acompañar las pastas, y tampoco faltan una buena copa de vino o un vermú.

Un bodegón con alma de cantina barrial
Después del furor en Chacarita, Tita amplió su universo con un segundo local en La Paternal, una especie de cantina moderna donde se puede sentarse a disfrutar un plato recién hecho sobre la vereda, como en los viejos tiempos. Sin grandes pretensiones, pero con muchísimo oficio, el lugar mantiene la estética y la calidez de un bodegón de siempre, aggiornado al paladar actual.

Dónde y cuándo ir
El local de Paternal de Tita La Vedette -especialmente pensado para sentarse y comer- queda en Paz Soldán 4993. Abre miércoles a viernes de 13 a 18, y sábados y domingos de 11 a 19. El de Chacarita queda en Bonpland 850 y, aunque aún funciona como fábrica de pastas para llevar y preparar en casa, también habilitó un espacio para comer al paso. Los horarios: miércoles a viernes de 12 a 19 horas y sábados y domingos de 11 a 15.
Para seguir sus novedades, el menú o ver sus pastas de cerca: @titalavedette en Instagram.