Durante la tarde de ayer un cuerpo fue encontrado en el lado brasilero de las Cataratas, en Foz de Iguazú, y horas más tarde se confirmó que se trata del turista que cayó a las aguas de las Cataratas del Iguazú el lunes pasado. El hombre era canadiense y tenía aproximadamente 60 años de edad.
El turista había caído desde el Salto Bosetti, del lado argentino. Su caída fue anunciada por las autoridades del Parque Nacional y, según informó el jefe de Guardaparques, Héctor Ball, se encontraba realizando un recorrido turístico junto con un grupo y un guía. Según los testigos, el canadiense se había descalzado y subido a la baranda que separa el camino del agua para sacarse una selfie, luego de lo cual cayó. Los investigadores consideraban que era posible que hubiera sido un suicido o también un accidente.
El cuerpo del turista fue encontrado entre un conjunto de ramas, cerca del puente Tancredo Neves que une Puerto Iguazú con Foz de Iguazú. El personal del Parque Iguazú y los bomberos voluntarios venían llevando adelante una búsqueda intensa que se vio dificultada en gran medida por el voluminoso caudal de agua que registró el río Iguazú recientemente por las lluvias en las altas cuencas, del lado brasilero.
En la zona trabajaron el Instituto Médico Legal y el cuerpo de Bomberos de Brasil, y por parte de Argentina intervinieron en el caso efectivos de la Policía de Misiones, la Prefectura Naval Argentina, los Bomberos Voluntarios y los guardaparques.
