En plena previa de Navidad, el Papa Francisco dio inicio a uno de los eventos más importantes para la Iglesia Católica: el Jubileo. El pontífice abrió la famosa Puerta Santa de la Basílica de San Pedro, un gesto cargado de simbolismo que marca el comienzo de esta tradición que se celebra cada 25 años desde 1300.
La ceremonia de apertura convocó a unas 30 mil personas en la Plaza San Pedro y se transmitió en vivo para millones de fieles en todo el mundo. Durante el próximo año, se espera que 30 millones de peregrinos lleguen a Roma para las celebraciones.
La tradición del Jubileo incluye pasar por la Puerta Santa, que normalmente está cerrada en la Basílica de San Pedro y solo se abre en estos años especiales. Los que la cruzan pueden recibir una indulgencia plenaria, o sea, una especie de perdón total.

Francisco llegó al atrio de la basílica, donde habían puesto una rampa frente a la Puerta Santa para que pudiera pasar con la silla de ruedas que usa por sus problemas de rodilla. Después de las oraciones y lecturas, se acercó, tocó la puerta tres veces mientras estaba sentado, y ahí se abrió.
”En la Navidad del Señor, luz de luz, esperanza inextinguible, nos disponemos a entrar con fe por la Puerta Santa. Los pasos de nuestro camino son los pasos de toda la Iglesia, peregrina en el mundo y testigo de la paz”, dijo el papa antes de abrir la puerta, y continuó: “Crucemos el umbral de este templo santo y entremos en el tiempo de la misericordia y del perdón, para que se abra a cada hombre y cada mujer el camino de la esperanza que no defrauda”.

El Papa Francisco expresó su deseo de que este Jubileo, que arrancó el martes con la apertura de la Puerta Santa, traiga esperanza a los países agobiados por las deudas y golpeados por la guerra. Lo dijo en su homilía durante la Misa del Gallo en la Basílica de San Pedro.
”En esta noche, la puerta de la esperanza se ha abierto de par en par al mundo; en esta noche, Dios dice a cada uno: ¡también hay esperanza para ti!”, dijo Francisco, que agregó que “Dios perdona siempre y lo perdona todo”.