Otoño es temporada de glaciares y brinda la oportunidad de disfrutarlos en su máxima expresión. Hay una variada oferta de hoteles para alojarte y realizar variadas actividades.
Otoño es una época mágica para disfrutar del escenario que presenta Patagonia. Con una vegetación que muta en colores y la temperatura ideal para realizar actividades al aire libre, en especial en El Calafate. Allí, hay mucho para realizar con los glaciares como marco y la naturaleza que aflora a cada paso.
Tremun Hoteles posee una variada oferta en el destino con distintas opciones de alojamiento. Esto para que los viajeros disfruten de los servicios de la cadena en cualquiera de los hoteles y eligiendo vivir una experiencia a su medida. En todos los hoteles el comienzo de la aventura se encuentra en el desayuno, con opciones para todos los gustos. Pastelería casera con ingredientes de la zona, constituyendo uno de los diferenciales que marcan el servicio ofrecidos.
«Cada viajero puede elegir entre cinco opciones que tiene la Cadena y disfrutar la Tierra de Glaciares de acuerdo a su perfil de turista.» expresa Pablo Lomuto Gerente Comercial de Tremun. Para aquellos que opten por alojarse en Mirador del Lago, se encontrarán con una vista panorámica a Lago Argentino. Rodeado de álamos, en un paisaje único y a sólo 500 metros del centro comercial.
En Calafate Parque Hotel ubicado en el centro de la ciudad, se encontrarán con una ambientación elegante con estilo propio. Cuenta con servicios de Spa como su jacuzzi, sauna y baño finlandés y un asesoramiento en la carta de masajes.
También es factible vivir una experiencia de campo en una estancia patagónica, Kau Yatún Hotel & Estancia. Es la propuesta ideal a metros del centro de la Ciudad, ubicado en la Estancia 25 de Mayo. Sus habitaciones amplias que conservan el estilo original, seducen con su ambientación y favorecen el placer en la estadía. Las experiencias que propone el lugar van desde poder compartir un fogón al aire libre y caminatas por el arroyo. Complementando el paseo por la huerta orgánica y por las instalaciones originales de la estancia.
Probar un vino montañés en el mirador del arroyo acompañado de una degustación de cordero confitado, es una de las experiencias únicas que el turista se lleva del lugar.
Rincón del Calafate y Sent Calafate completan el portfolio de propuestas que están a disposición y a la medida de cada viajero. Con sus gustos y preferencias, pero manteniendo la calidad en los servicios de hotelería, gastronomía (con las propuesta de cocina patagónica en sus restaurantes). También manteniendo el clima de relax, imprescindible para crear una experiencia única en el destino.
Fuente: El Calafate turismo
