¿Querés sorprender a tu familia con unos ravioles distintos? Este domingo en casa, aprovechando el fin de semana súper largo, hacete estos ravioles con queso de cabra y una salsa especial con un sabor bien intenso y delicioso.
En líneas generales, el queso que se usa como relleno de los ravioles suele ser mozzarella, ya que con el calor no se derriten tanto. Sin embargo, su sabor puede percibirse un poco repetitivo ya que lo usamos para muchas cosas.
Por eso, el queso de cabra es una variante muy buena, que le dará una textura más dura y un sabor rústico y sutil, pero delicioso. Para acompañarlos, elegiremos una salsa simple, pero con ingredientes bien intensos para que se destaquen a la par que los ravioles.
Ingredientes para los ravioles
Masa
- Aceite de oliva: 2 cdas.
- Sal: A gusto
- Huevos: 3 Unidades
- Harina integral superfina: 300 g
- Semolín: Cantidad necesaria
Relleno
- Sal: A gusto
- Queso de cabra blando: 300 grs.
- Tomillo: 2 cdas.
- Echalottes: 200 g
Salsa
- Pimienta: A gusto
- Aceitunas negras descarozadas: 3 cda.
- Tomates secos: 1 Taza
- Aceite de oliva: 3 cdas.
- Tomillo: 1 cda.
- Romero: 1 cda.
Procedimiento
Para la masa
- Coloque en un cuenco la harina junto con la sal, mezcle y forme una corona, coloque los huevos en el hueco y el aceite de oliva, mezcle comenzando desde adentro hacia fuera y luego amase. Cubra con papel film y reserve en la heladera durante 2 horas.
Para el relleno
- Dore los echalottes en aceite de oliva y una cucharadita de azúcar.
- Coloque en un cuenco el queso de cabra junto con el echalotte, tomillo y sal, mezcle bien.
Para la salsa
- Lleve una sartén a fuego con aceite de oliva, tomillo, romero, aceitunas negras aplastadas y los tomates secos, cocine durante 15 minutos.
Armado
- Estire la masa de ravioles con un palo de amasar, corte en dos rectángulos, uno que sea unos centímetros más grande.
- Tome con una cuchara pequeñas porciones y todas iguales del relleno, disponga sobre el rectángulo más chico dejando espacio entre cada bollito del relleno, pincele los bordes con agua y disponga encima el rectángulo más grande, con las manos de forma a los ravioles quitándole por completo el aire. Corte los ravioles con un cuchillo y reserve en una fuente con semolín.
- En otra cacerola con abundante agua hirviendo y sal cocine los ravioles, una vez que floten cocínelos durante 1 minuto más, retírelos y colóquelos dentro de la salsa, saltee unos minutos y retire.
Presentación
- Sirva en un plato hondo una porción de ravioles y salsee con la salsa.
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Columnistas
Mi respeto no es solo hacia ella, sino hacia quienes la siguen. Hacia sus militantes, sus organizaciones, sus simpatizantes, su fidelidad inclaudicable. Mi envidia, sana pero envidia al fin, va para quienes no sienten hoy esa orfandad política que muchos otros sí sufrimos.
