Bullrich y Macri llegaron a un acuerdo sobre quién se encargará de alojar a las personas que cometen delitos en la Ciudad de Buenos Aires y deben ir presas. El ministerio de Seguridad anunció este jueves que ya trabaja con el distrito porteño para que lleve el control de los detenidos que cometen un delito en ese distrito y que aún están alojados en el Servicio Penitenciario Federal. La decisión llega después de que Macri se quejara reiteradas veces de la sobrepoblación en las comisarías. De las 11.453 personas que se encuentran en el SPF, 5564 son quienes están privados de la libertad en causas que tramitan ante la justicia de la Ciudad de Buenos Aires.
Después de las reiteradas fugas de detenidos de comisarías de la Ciudad de Buenos Aires, la ministra de Seguridad y el jefe de Gobierno acordaron que a partir de ahora la administración de Jorge Macri se hará cargo de la "ejecución de las penas privativas de la libertad y la guarda de detenidos en forma cautelar por delitos no federales", segun se informó desde el Gobierno porteño.
Por su parte, Bullrich informó a través de su cuenta en la red socia X: "Acordamos que haremos el correspondiente traspaso para que la Ciudad tenga a su cargo la responsabilidad de los presos de su distrito y así profundizar su autonomía".

Hoy, las personas que cometen delitos de caracter Federal son alojados en el SPF, por lo que "se transferirá la competencia del SPN para ejecutar las penas y la guarda al ámbito de la Ciudad, aunque esas personas que se encuentran presas todavía sigan siendo juzgados por jueces nacionales".
La situación de sobrepoblación en las cárceles es criticada desde antes de los escándalos por las fugas de presos. En abril de este año, se declaró la "emergencia en materia penitenciaria", donde se estableció una serie de modificaciones para mejorar el servicio penitenciario y la construcción de nueva infraestructura penitenciaria.
Puntualmente, la declaración de emergencia en materia sanitaria que se publicó en el Boletín Oficial informó que se reiniciarán las obras para construir más pabellones en el Complejo Penitenciario de Marcos Paz y el Complejo Federal de Condenados de Agote en Mercedes y el Centro Federal Penitenciario de Coronda, en Santa Fé, dos obras que se habían paralizado.
Waldo Wolff, el ministro de Seguridad porteño, había dicho sobre la sobrepoblación en las cárceles que "la solución es política. Que se lleven a los presos. Que tome conciencia el gobierno nacional que se tiene que hacer cargo de esto", pero su pedido no había trascendido. Ahora, con el traspaso, llegaron a un primer acuerdo para comenzar a agilizar una resolución.
Actualmente, el Servicio Penitenciario Federal aloja a 11.453 personas, número que excede la capacidad general establecida por la Resolución Ministerial de Condiciones de Habitabilidad, que es de 11.361 plazas. De ese total, unas 5.564 son personas privadas de la libertad en causas que tramitan ante la Justicia de la Ciudad de Buenos Aires.