Si te dieron ganas de algo rico y rápido, este bizcochuelo de café al microondas es la solución perfecta. Con pocos ingredientes y en solo tres minutos, podés disfrutar de un postre casero y delicioso. La receta, difundida por la influencer de cocina Pam Stein, es tan fácil que podés prepararla junto a los más chicos de la casa.
Pam Stein dice que este bizcochuelo "te transportará a Nueva Orleans; bebiendo una taza de café con leche en la vereda del barrio francés". Si bien no todos podemos ir hasta allá, sí podemos disfrutar de esta receta de bizcochuelo de café en la comodidad de nuestra casa, en solo unos minutos y usando el microondas. Va perfecto para preparar en taza.

Ingredientes del bizcochuelo:
- 1 taza de harina común
- 1 paquete (1 onza) de café en polvo instantáneo
- 2 cucharaditas de polvo para hornear
- ¼ taza de miel pura
- 6 cucharadas de leche
- ⅓ taza de aceite vegetal
- 3 cucharadas de mini chispas de chocolate (divididas)
- Jarabe de chocolate (opcional, para rociar al gusto)

Mezclás y al microondas: la preparación
- En una taza, mezclá la harina, el café instantáneo y el polvo para hornear. Revolvé bien hasta integrar todo.
- Agregá la miel, la leche y el aceite. Mezclá hasta que no queden grumos grandes.
- Incorporá 2 cucharadas de mini chispas de chocolate.
- Dividí la mezcla en dos tazas aptas para microondas.
- Cociná en el microondas durante 2 minutos a máxima potencia o hasta que el bizcochuelo esté completamente cocido.
- Dejalo enfriar por 1 minuto, luego rociá con jarabe de chocolate y espolvoreá con el resto de las chispas de chocolate.
¡Y listo! En solo tres minutos, tenés un bizcochuelo de café increíblemente sabroso y fácil de hacer.
Lo que tenés que saber antes de cocinar en el microondas
Si bien el microondas es muy práctico, hay algunos puntos a tener en cuenta para aprovecharlo al máximo y evitar que tus preparaciones no salgan como esperabas. Pam Stein ofrece unos consejos clave:
- El agua es crucial: El microondas funciona generando calor al hacer vibrar las partículas de agua en los alimentos. Por eso, es importante asegurarse de que los ingredientes tengan suficiente humedad para que se cocinen correctamente.
- Cuidado con la textura crujiente: Los microondas no son ideales para obtener comida crujiente. Si bien sirven para cocinar rápido, no producen ese dorado y crujiente que conseguimos en el horno. Tené cuidado con la sobrecocción, ya que los alimentos pueden volverse secos o gomosos.
- Conocer el vataje de tu microondas: Cada uno tiene una potencia diferente. Por ejemplo, una receta pensada para uno de 700 vatios puede quedar sobrecocida en uno de 1.000 vatios. Si no ajustás el tiempo, el bizcochuelo podría no salir como esperas.
- Usá recipientes aptos: Asegurate de que el recipiente que usás sea seguro para microondas, como tazas de cerámica o vidrio (evitá los de plástico, ya que podrían liberar sustancias químicas).
- Plataforma giratoria: Si tiene plataforma giratoria, ¡usala! Ayuda a que la cocción sea más pareja. Si no tiene, girá la taza manualmente para evitar puntos calientes.

Cosas que no debés cocinar en el electrodoméstico: Stein advierte que algunos alimentos no son adecuados para cocinar en este horno, como el pescado, que se seca fácilmente, o las verduras de hoja verde como la espinaca o la col rizada, que pueden causar chispas por su contenido de minerales.