La discusión sobre retenciones está en el tapete y tras la decisión del Gobierno de volver a aumentarlas tras el vencimiento de la medida que las bajo temporalmente hasta el 30 junio, en el campo ya empiezan a hacer cuentas de cual sería su impacto.
Justamente a esto se dedico Ieral, que realizó cálculos sobre cuánto perderían los agricultores y cuánto más pasaría a recaudar el Estado nacional.
Primero cabe recordar que la baja de retenciones fue del 20% promedio, por lo que la soja pasó de tributar un 27,5% del 33% original, sus subproductos pasaron desde 31% a 26% y el maíz y el trigo pasaron de un 12% a un 9,5%.

O sea, la logíca indicaría que el impacto sería de un 20% promedio en ambos casos, pero hay que tomar en cuenta también el movimiento de los precios internacionales, los locales y el nuevo esquema cambiario actual, en el cual la cotización del dólar se encuentra especialmente volátil.
Así, según Ieral, si el gobierno aumenta los derechos de exportación a fines de junio, la rentabilidad de producir granos (ingresos menos costos y todos los impuestos) empeorará entre un 11% y12% en zona núcleo, que comprende el norte bonaerense y el centro-sur de Córdoba y Santa Fe, región que reporta generalmente los mejores rendimientos y se encuentra cercana a los puertos, lo cual abarata los costos logísticos.
De esta manera, en la consultora estiman que las pérdidas para los productores de soja y maíz podría ubicarse en US$ 30 y US$ 60 por hectárea.
Ahora bien, si nos vamos de la zona núcleo y nos adentramos en la región extrapampeana, la merma en la rentabilidad se incrementa considerablemente. Así, en Ieral estiman que la misma sería de entre el 21% y 74%, implicando pérdidas de US$ 32 a US$ 43 hectárea.
Recaudación del Estado por retenciones
¿Y qué gana el Estado? Por supuesto, una mayor recaudación por su parte, ya que podría percibir entre un 11% y 20% más según tipo de productor y zona, lo que implica entre US$ 44 y US$ 70 por hectárea.

"Haciendo algunos cálculos y supuestos, si a mediados de año quedase sin comercializar el 50% del saldo exportable de maíz, el 60% del de soja y el 20% del de trigo del ciclo 2024/2025, la suba de alícuotas generará, por estos granos remanentes y a los precios internacionales esperados, un aumento de recaudación aproximado de US$ 930 millones en el plazo en que se complete la comercialización (8/9 meses)", marcó el trabajo de Ieral.
Si bien quedan otros granos que pueden agregar algunos dólares extras, el hecho es que "la medida tendría un impacto relativamente bajo en términos de recaudación y del resultado del ejercicio fiscal 2025 (no mayor al 0,1% del PIB 2025)", concluyó el informe.