Un delito por fentanilo preocupa a la comunidad bonaerense de Quilmes: una profesional de la salud que trabaja en un Hospital municipal fue arrestada este lunes, acusada de falsificar recetes de la droga con recetarios de la Municipalidad de Quilmes.
Nancy Anahí Villagra, enfermera, quedó detenida por la Dirección de Investigaciones contra el Crimen Organizado, en una causa a cargo de la Superintendencia de Delitos Complejos. La denuncia contra Villagra fue hecha por la propia Municipalidad y a raíz de ella se realizaron tres allanamientos, entre ellos, su domicilio en Florencio Varela.
Durante los allanamientos se incautaron documentos con anotaciones, 54 recetas para adquirir fentanilo y morfina, una historia clínica de un paciente que necesita estos analgésicos; un talonario de recetas que habría sido tomado del Hospital de San Francisco Solano Eduardo Oller y un sello de un médico especializado.
Según el informe policial, quienes están señalados como sospechosos de consumir fentanilo facilitado por esta enfermera son pacientes suyos pero también personas que no se trataron nunca en el centro médico.
En la investigación llegaron a la hipótesis de que Villagra realizaba "las prescripciones apócrifas, selladas y firmadas con presuntas rubricas de distintos profesionales médicos". Este martes, la detenida deberá prestar declaración delante de la fiscal Ximena Santoro, que lleva el caso.
En fentanilo es un potente analgésico opioide con alto grado de adicción que en Argentina solo se puede adquirir bajo receta, indicada para pacientes que deben tratar un dolor agudo. La venta masiva de esta droga en Estados Unidos desató una crisis en el país que llevó a los medios a apodarla la "droga zombie" por la cantidad de adictos y muertes que produjo, ya que pasó de causar 235 muertes en 2010 a 34.429 en 2021, según un estudio de la Universidad de California-Los Ángeles (UCLA).
En Argentina, la preocupación por el crecimiento del consumo de fentanilo llevó a que la Dirección General de Aduanas publicara una resolución endureciendo los controles sobre la importación y exportación del fentanilo, con el objetivo de evitar el tráfico ilegal.
Un enfermero fue detenido por robar fentanilo en La Matanza
Walter Hugo Mansilla, un enfermero y ambulanciero de 45 años, quedó en el ojo de la tormenta tras ser detenido por la Policía Bonaerense. Lo acusan de robar tres ampollas de fentanilo del Hospital Paroissien, ubicado en Isidro Casanova, partido de La Matanza.
El hecho se descubrió gracias a las cámaras de seguridad del hospital, que captaron a Mansilla con un ambo verde llevándose las ampollas del anestésico. Este medicamento, de uso estrictamente hospitalario, es altamente controlado y está lejos del tipo de fentanilo ilegal que suele circular en otros países.
La denuncia fue hecha el mismo día por una empleada del hospital, que advirtió la desaparición de tres ampollas de 10 mililitros. Tras revisar las imágenes, el Grupo Táctico Operativo de La Matanza identificó al sospechoso. Según las grabaciones, Mansilla llegó al hospital en una ambulancia de una empresa privada, ingresó al centro de salud, tomó las ampollas y se fue en su auto personal
Después de un allanamiento ordenado por la fiscal Evangelina Sánchez, de la UFI Nº11 de La Matanza, Mansilla fue detenido en su domicilio, donde los agentes encontraron las ampollas de fentanilo robadas y otros medicamentos. A pesar de la gravedad del hecho, el enfermero recuperó su libertad mientras continúa el proceso judicial en su contra, en un caso que fue caratulado como "hurto agravado".
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