Milei, en sus primeros 6 meses de Gobierno, acumuló el equivalente a un mes fuera del país. Con un viaje a Italia en puerta, que tiene programado entre el 12 y el 15 de este mes; se conoció que, desde que asumió, viajó 7 veces por asuntos no oficiales.
La gira internacional se desagrega en: 4 a Estados Unidos, su destino predilecto, donde participó de conferencias empresariales, recibir reconocimientos de organizaciones de derecha y se reunió con figuras que admira, como el expresidente Donald Trump o el magnate Elon Musk. Después, viajó a España para reunirse con el líder de ultraderecha española, Santiago Abascal, que acaba de perder en las elecciones parlamentarias. Viajó a Suiza para participar del Foro Económico Mundial de Davos y visitó a Benjamín Netanyahu en Israel.
Pero la recorrida mundial de Milei continúa: esta semana, entre el 12 y 15 junio, el presidente viaja a Italia, invitado por la presidenta Georgia Meloni el G7. En principio, el viaje quedó teñido por el bochorno mundial que supuso cancelar la cumbre con el presidente de Francia, Emanuel Macron.
La polémica continuó porque desde la presidencia establecieron que la Cancillería, a cargo de Diana Mondino, financie los dos millones de dólares que Milei necesita para viajar en los viajes por venir, hecho que resquebraja la relación entre Karina Milei y la canciller.
En tanto, entre el 22 y 24 de junio, Milei vuelve a viajar a Europa y visitará España, Alemania y República Checa, a donde irá a buscar premios de fundaciones liberales. Sus viajes a estos destinos, como la cumbre de VOX en España, a la que asistió, o la visita al líder de El Salvador para su asunción, Nayib Bukele, ya que consiguió la reelección, buscan posicionarlo como un exponente de la derecha mundial.