Cristian "Nik" Dzwonik, el historietista que inventó al popular personaje infantil Gaturro, denunció que los actos vandálicos sobre la estatua del protagonista de sus libros llegaron a un punto de no retorno, y la escultura quedó "irrecuperable". Mientras el humorista le atribuye razones políticas a las pintadas y roturas que recibió la estatua, muchos usuarios de redes se rieron de la situación y hasta lo denunciaron por plagiador.
La estatua se inauguró en el 2013, en la plaza Perón. En aquel momento, según mostró el humorista en su cuenta de Instagram, esta se encontraba en perfecto estado, pero fue sufriendo distintas transformaciones a través del tiempo. Según Nik, la estatua es atacada cada vez que él "incomoda al poder".
En el 2019, según relató el propio historietista, le cortaron la mano al gato de fantasía. "Luego, comenzó la vandalización continua y sistemática", afirmó.
La denuncia de Nik generó muchísimas respuestas. No todas positivas, y no tantas solidarizándose con el humorista. El músico Dillom, uno de los más populares de la escena del hip hop en Argentina, fue escueto e irónico: "Fui yo".
Otros usuarios acusaron a Nik de plagiar el trabajo de otros. Desde comparaciones entre Gaturro y Garfield, el popular gato de los comics estadounidenses, hasta viñetas específicas con un parecido muy llamativo con obras de autores como Quino o Fontanarrosa.
En relación a Quino, no faltaron las comparaciones entre la estatua de Gaturro y la de Mafalda, que está apenas a seis cuadras de la primera y permanece intacta desde hace años. "El material mas resistente no es el METAL Nik, el material mas resistente es que la gente te quiera", expresó un usuario.
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