La causa judicial que investiga la masiva llegada de embarazadas rusas a Argentina sumó un nuevo capítulo. La denuncia realizada por la jueza a cargo, María Servini, por el supuesto cobro doble de la Asignación Universal por Hijo (AUH) por parte de la organizadora de los viajes, Elena Kuklina, puso en la mira a la Anses. Ahora, el organismo respondió.
En los últimos días hubo un allanamiento en ese departamento y allí encontraron los elementos probatorios del supuesto cobro. Desde el Juzgado hicieron una extracción de esa prueba y pidieron que se investigue si ese supuesto cobro implica un delito: la denuncia fue sorteada y cayó en el Juzgado Federal N°10, a cargo de Julián Ercolini.
Kuklina no percibió nunca una AUH, pero si una AAFF por estar inscripta al monotributo. Pero el estilo de vida de la rusa parece mucho mayor al tope de ingresos que establecen para ese cobro.
Al mismo tiempo, la Anses se presentó ante la Justicia (al juzgado de Servini, no de Ercolini) para clarificar la situación. Según informaron, sostuvieron que Kuklina "no percibe ni percibió Asignación Universal por Hijo (AUH)", sino que lo que cobra la mujer rusa es una Asignación Familiar a causa de su inscripción como monotributista. En el escrito, sostuvieron que la AUH y la Asignación Familiar "prevén objetos y requisitos distintos".
El tema es que Kuklina, de 26 años y madre de una nena y un nene nacidos en Argentina, está efectivamente inscripta como monotributista, pero vive en una torre de Puerto Madero por la que paga 3 mil dólares mensuales, tiene oficinas en Recoleta y posee una camioneta 4x4. Además, durante el allanamiento en su casa encontraron 70.000 dólares y 3000 euros.
Ahora, se deberá a establecer si se trata de una Asignación Universal por Hijo cobrada de manera irregular, o, si se trata de la AAFF, por qué accedió al beneficio cuando su estilo de vida parece estar bastante por encima del tope de ingreso que la Anses establece ($316.731 familiar y $158.366 individual).
