La Justicia podría investigar a los usuarios que descarguen la aplicación Magis TV, una IPTV que ha sido objeto de bloqueos judiciales por piratería y que, pese a las restricciones, sigue encontrando formas de operar en el país.
A pesar de los reiterados intentos por frenar su avance, Magis TV continúa siendo una opción popular para quienes buscan acceder a contenido audiovisual sin pagar. Con más de 55 millones de visitas en los últimos seis meses, la plataforma ofrece acceso a más de 900 canales en vivo, 5.000 películas y series, incluyendo contenido exclusivo de servicios de streaming como Netflix, Amazon Prime y Disney+.
Sin embargo, el uso de esta aplicación no está exento de riesgos. En septiembre de 2024, el Juzgado N.º 4 de San Isidro, a cargo del juez Esteban Rossignoli, ordenó el bloqueo de todos los dominios vinculados a Magis TV por violaciones a la propiedad intelectual. A pesar de la medida, la plataforma ha logrado evadir restricciones y mantener su funcionamiento.
Magis TV: la advertencia de los expertos en ciberseguridad
Desde el sector de la ciberseguridad advierten sobre los peligros de utilizar este tipo de servicios. Jorge Bacaloni, presidente de la Alianza contra la Piratería Audiovisual, señaló que "la descarga y el uso de aplicaciones ilegales pueden ser considerados delitos informáticos y ser objeto de investigación judicial".
Además, expertos destacan que estas aplicaciones carecen de protocolos de seguridad, lo que las convierte en una puerta de entrada para virus y malware que pueden comprometer la información personal de los usuarios.
Las grandes plataformas de streaming, como Netflix y Disney+, están intensificando sus esfuerzos para frenar la piratería, implementando nuevas estrategias legales y técnicas para proteger sus catálogos. Mientras tanto, la persistencia de Magis TV pone en duda la efectividad de las medidas tradicionales para combatir la distribución ilegal de contenido digital.
En un escenario donde la demanda por acceso a entretenimiento sigue en alza, la disputa entre la legalidad y la accesibilidad al contenido online parece estar lejos de resolverse. La Justicia, por su parte, podría endurecer su postura y comenzar a investigar no solo a los responsables de la plataforma, sino también a los usuarios que la utilizan.
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