La mousse de chocolate es un clásico indiscutido de la pastelería, ese postre que nunca falla cuando queremos darnos un gusto dulce y sofisticado. Pero si alguna vez intentaste hacerla en casa, sabés que la receta tradicional puede volverse un poco engorrosa: lleva huevos, crema, tiempo y algo de técnica. Por suerte, hay una versión que viene ganando terreno en redes sociales por su simpleza, sabor y perfil saludable.
Esta mousse de chocolate viral se prepara con tan solo dos ingredientes —sí, leíste bien— y no requiere ni horno ni batidos complicados. Ideal para quienes buscan opciones más livianas o con restricciones alimentarias, esta variante no lleva ni lácteos ni huevos. Solo necesitás chocolate y agua para lograr una textura suave y aireada que sorprende por su resultado.
Lo más llamativo es que detrás de esta preparación hay ciencia: el secreto está en cómo el chocolate emulsiona con el agua al ser batido sobre hielo, atrapando burbujas de aire que le dan esa consistencia tan característica. Una técnica simple, rápida y perfecta para resolver un antojo. Ideal para una noche de postre improvisado o para lucirte con algo distinto.

¿De dónde salió esta mousse de chocolate viral?
Aunque parezca una novedad, esta mousse de chocolate sin crema ni huevos fue popularizada por el físico y chef francés Hervé This, uno de los padres de la gastronomía molecular. Su descubrimiento se basa en principios científicos que demuestran que el chocolate, al mezclarse con agua y enfriarse rápidamente mientras se bate, puede crear una emulsión estable y aireada. Las redes sociales la rescataron y viralizaron como una opción vegana, saludable y minimalista. Hoy, miles de usuarios la replican con entusiasmo, fascinados por su simpleza y su sabor intenso a chocolate puro.

Cómo hacer la mousse de chocolate viral con dos ingredientes
Ingredientes:
- 150 gramos de chocolate de buena calidad (con alto porcentaje de cacao, mínimo 60%)
- 150 ml de agua (podés usar 200 ml si querés una mousse más liviana)
Paso a paso:
- Derretí el chocolate: Calentá el agua hasta hervir y volcala sobre el chocolate picado en un bol. Revolvé hasta que se forme una mezcla homogénea.
- Prepará el baño María inverso: Llená un bol grande con agua fría y hielo. Apoyá encima el bol con el chocolate derretido, asegurándote de que toque el hielo.
- Batí con ganas: Usá batidora eléctrica o batidor de mano y batí mientras la mezcla se enfría. Vas a ver cómo empieza a tomar cuerpo y se transforma en una mousse de chocolate aireada.
- Serví y enfriá: Repartí en recipientes individuales y llevá a la heladera por al menos una hora antes de servir.

La versión clásica: mousse de chocolate tradicional
Si bien esta versión viral tiene lo suyo, la mousse de chocolate clásica también merece su lugar. En su receta original, se utilizan yemas y claras de huevo, crema batida, chocolate semiamargo y, en muchos casos, un toque de licor. Es más laboriosa, sí, pero el resultado es un postre ultra cremoso, con una textura inconfundible que muchos siguen eligiendo para ocasiones especiales. Claro que también es más calórico y no apto para quienes evitan productos de origen animal, a menos que se implementen los reemplazos correspondientes.
Sea cual sea tu elección, la mousse de chocolate sigue siendo un postre que enamora. Y con esta versión viral de sólo dos ingredientes, ahora podés disfrutarla cuando quieras, sin complicarte y cuidando un poco más lo que comés. ¿Te animás a probarla?