La Major League Soccer (MLS) buscará incorporar a la figura y campeón del Mundial de Qatar, Lionel Messi, para que se sume a un equipo de la liga estadounidense antes de que comience la siguiente Copa del Mundo en 2026. Dicha competencia se disputará en México, Estados Unidos y Canadá; y el fichaje del astro argentino sería una gran forma de promocionar el evento.
La MLS planea ofrecerle al capitán de la Selección Argentina una franquicia, así como sucedió con el exfutbolista David Beckham. Don Garber, principal responsable de la liga estadounidense, habló con The Athletic sobre la posible llegada de Lionel Messi. “Cuando hay rumores que lo conectan a él con el Inter Miami, es genial. Sería fantástico para la MLS”, agregó Garber.
Lo cierto es que el contrato de Lionel Messi finalizará a final de temporada con el Paris Saint Germain. A pesar de que el PSG busca retenerlo, y el propio Messi tiene la intención de seguir en Europa algunos años más, en Estados Unidos no descartan su incorporación. El Inter Miami es el equipo interesado en contratarlo y la idea del equipo sería similar a lo que sucedió con David Beckham. En su fichaje incluyeron una cláusula para comprar una franquicia de la MLS.
Cabe recordar que Messi ya cuenta con un lujoso departamento en Miami y su familia ve de buena forma mudarse a Estados Unidos. Lo que podría complicar la llegada de la Pulga a la MLS son las restricciones salariales. El capitán argentino es uno de los deportistas mejores pagos del mundo y en la Major League Soccer cada club tiene un máximo de 3 jugadores que superen el salario límite establecido por la propia liga. Actualmente, el italiano Lorenzo Insigne es el futbolista mejor remunerado de la competición, con un salario base de 14 millones de dólares.
Sin embargo, a pesar de las dificultades, dicha competencia se encuentra en un exponencial crecimiento. En los últimos años, varios futbolistas llegaron a la liga procedentes de Europa. Entre esos casos se encuentran jugadores como Zlatan Ibrahimović, Kaká, Gareth Bale, Giorgio Chiellini y el propio David Beckham. En estos días, el futuro de Lionel Messi todavía es incierto.
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