La Cámara de Casación confirmó la condena de Cristina Kirchner a seis años de prisión e inhabilitación de por vida para ejercer cargos públicos en el delito de administración fraudulenta en la causa Vialidad. La decisión llegó de parte de tres jueces que integran el máximo Tribunal. Se trata de Gustavo Hornos, Mariano Borinsky y Diego Barroetaveña, tres jueces antikirchneristas cercanos a Mauricio Macri que tuvieron participación clave en casos de envergadura política a lo largo de los años.
Cristina Kirchner recusó a los tres jueces a través de su abogado, Carlos Beraldi, y su asistente Ari LLernovoy, por su cercanía sospechosa con Macri. Al caso de Hornos se le suma una denuncia por violencia de género que no prosperó, ya que la denunciante de violación retiró la acción penal. La acción judicial para desplazar a los jueces no prosperó en el Tribunal e igualmente los tres votaron la confirmación de condena.
A pesar de la condena, Cristina Kirchner apelará frente a la Corte Suprema de Justicia pero su defensa todavía debe decidir cuándo y por qué causal elevará el juicio, aunque uno de los argumentos que ya esgrimió es que se trata de una persecución de tinte político que busca la proscripción de la expresidenta.
Quiénes son los tres jueces que condenaron a Cristina Kirchner
Gustavo Hornos
Forma parte de la Cámara de Casación desde su creación en 1995. Intervino en casos con repercusión pública. Autorizó la apertura de investigación del fiscal Alberto Nisman contra Cristina Kirchner días antes de su muerte; ratificó la condena a Amado Boudou a cinco años y diez meses de prisión por negociaciones incompatibles con el cargo público -era director del ANSES durante la primera presidencia de Cristina- en el caso Ciccone Calcográfica.

Junto a Borinsky formó parte de la condena a cuatro años de prisión a la exsecretaria de Medio Ambiente María Julia Alsogaray por fraude contra la administración pública en el marco de la privatización de ENTEL durante el gobierno de Carlos Menem. También intervino en el caso de la explosión de la fábrica militar de Río Tercero.
Beraldi lo recusó por haber visitado 6 veces a Mauricio Macri en la Casa Rosada mientras estaba en curso la causa Vialidad y el otro proceso judicial contra la expresidenta conocido como "la ruta del dinero K".
Además, el juez Hornos fue denunciado por violencia de género en una causa que terminó archivada porque la denunciante no prosiguió en la acción penal. En este caso, el Consejo de la Magistratura aún no cerró la investigación administrativa.
Mariano Borinsky
Se trata del actual presidente de la Cámara de Casación. Es el coordinador del equipo que realizó la extensa reforma del Código Penal, proyecto que acaba de concluir y comenzó en 2018 bajo la presidencia de Mauricio Macri. La defensa de Cristina Kirchner lo recusó por haber visitado 18 veces a Mauricio Macri mientras este era este era Presidente.
Recientemente, su nombre comenzó a circular como posible candidato del Gobierno de Milei para convertirse en el Procurador General de la Nación y se lo vio junto a funcionarios del oficialismo que viajaron a Paris y Sangapur para participar en la evaluación de la GAFI, donde Argentina logró no formar parte de la lista gris de países que no combaten el lavado de dinero.

El juez intervino en el caso de venta de armas -construidas en la fábrica militar Río Tercero- a Ecuador y Croacia durante la presidencia de Menem.
Diego Barroetaveña
Fue uno de los jueces, junto a Daniel Petrone, que reabrió las dos causas contra Cristina Kirchner, Hotesur-Los Sauces y el caso del Memorándum con Irán, que estaban cerradas, ya que la exvice habría sido absuelta sin juicio oral.
Barroetaveña absolvió, junto con sus colegas Carlos Mahiques y Daniel Petrone, a Ángelo Calcaterra, el primo constructor de Mauricio Macri, acción con la que absolvió a Calcaterra a afrontar un juicio oral por los cuadernos de coimas.

El juez proviene del Tribunal Oral y llegó a la Cámara de Casación por la condena a los dirigentes de la Unión Ferroviaria a 15 años de prisión, como partícipes necesarios del crimen del trabajador tercerizado y militante del Partido Obrero- Mariano Ferreyra- que se produjo durante una manifestación donde la víctima protestaba por el pase a planta permanente en 2010. A su vez Barroetaveña, es dirigente de la Asociación de Magistrados en la Lista Bordó, una de las más antikirchneristas.