En medio de una creciente disputa diplomática con Venezuela por el secuestro del gendarme Nahuel Gallo, el canciller argentino, Gerardo Werthein, le respondió al fiscal general del régimen bolivariano, Tarek William Saab, a quien consideró "responsable de violaciones sistemáticas a los derechos humanos".
A través de su cuenta de Twitter, Werthein lanzó un fuerte comunicado luego de que el funcionario venezolano hiciera duras críticas personales en su contra. El Canciller argentino enfatizó que "el caso del ciudadano argentino Nahuel Gallo es una prueba contundente de las graves violaciones al derecho internacional y a los derechos humanos fundamentales que usted avala desde su posición”.
En esa línea, remarcó que su "retórica vacía y sus agravios infundados" no van a poder "ocultar la gravedad de este caso ni justificar las atrocidades que legitima desde su cargo". Werthein advirtió que lo mantienen "con imputaciones falsas, incomunicado, negándole acceso consular y asistencia legal constituye una violación directa de la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares, específicamente del Artículo 36, que garantiza el derecho de los ciudadanos extranjeros a comunicarse con su consulado y recibir protección”.
En ese sentido, sostuvo que la detención irregular del argentino constituye "una desaparición forzada, un crimen de lesa humanidad reconocido por el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional". “Le recuerdo que los crímenes de lesa humanidad no prescriben. Los responsables de estas violaciones enfrentan el escrutinio de la justicia internacional, que actúa más allá de las fronteras y las narrativas que usted intente construir”, agregó.

Por último, Werthein reclamó en nombre del gobierno argentino la "inmediata liberación de Nahuel Gallo; el acceso consular inmediato y sin restricciones, conforme a la Convención de Viena; la provisión de una prueba de vida que certifique su integridad física, y garantías de asistencia legal y contacto con su familia”. Advirtió que el caso “será llevado a todas las instancias necesarias hasta garantizar su liberación" y aseguró que van a "demostrar que las violaciones a los derechos humanos no quedarán impunes”.
Días atrás, el Ministerio Público venezolano, encabezado por Saab, había apuntado contra el Canciller y contra la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y los acusó de haber hecho "declaraciones inculpadoras" durante una conferencia de prensa tras recibir a familiares del gendarme secuestrado. A partir de esos dichos, la fiscalía venezolana aseguró que "estos funcionarios han quedado señalados como personas de interés en la investigación, por lo tanto serán incorporados a la causa".